noviembre 15, 2017
Luego del paso de los huracanes Irma y María por Puerto Rico, el turismo que es el soporte económico principal de la isla municipio de Culebra, se ha detenido completamente. Gran parte de la población se ha quedado sin empleo, lo que consecuentemente ha elevado los niveles de ansiedad y depresión entre los culebrenses. Con esto la atención médica especializada se convierte en una necesidad inmediata que no ha podido llegar de manera constante.
Según la trabajadora social de Culebra, Yajaira Rivera Cruz, la inoperatividad parcial del aeropuerto y la falta de regulación en el horario establecido de las lanchas ha complicado la disponibilidad de los servicios. Dado que todos los suministros llegan desde la Isla Grande, las limitaciones físicas comienzan con el cierre de las farmacias por el complicado acceso a los medicamentos.
A más de un mes desde el golpe de los fenómenos atmosféricos la sala de emergencia de la isla municipio no está funcionando, sin embargo, hay dos centros médicos abiertos. “Los especialistas no están 24 horas en la isla municipio porque viven fuera de ella y no hay vuelos disponibles para transportarlos”, dijo Rivera Cruz.
La trabajadora social explicó que por ahora se está manejando la inmediatez de la crisis. “Los líderes llevan a cabo actividades deportivas y recreativas para entretener a los niños que hacen parte de las comunidades vulnerables a las cuales su rutina les fue transformada totalmente”, señaló Rivera Cruz.
A pesar de la falta de recursos médicos, gracias a las ayudas recibidas luego del huracán Irma, Rivera Cruz sostuvo que Culebra está muy bien en agua y comida. La isla municipio funciona con una planta que en las noches suple el servicio eléctrico y de acueducto a toda su población.